“En casi todos los lugares en que trabajamos, lxs líderes de lxs trabajadorxs señalan las condiciones climáticas extremas como una problemática cada vez más grave para quienes trabajan en la informalidad”. La observación de Caroline Skinner, directora del Programa de Políticas Urbanas de WIEGO, pone de manifiesto una verdad que se suele ignorar en la gobernanza climática a nivel mundial: el cambio climático es tanto una crisis ambiental como de los medios de subsistencia.

Con vistas a las negociaciones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima de 2025 (COP30), prevista para noviembre, la investigación de WIEGO sobre el cambio climático y la economía informal urbana aporta herramientas para enfrentar estas dos caras de la realidad. Nuestro estudio, realizado con y para las organizaciones de trabajadorxs, mapea cómo está repercutiendo el cambio climático en la salud, las rutinas laborales, la productividad y los ingresos de lxs trabajadorxs en empleo informal en Bangkok, Delhi, Lima y seis ciudades de Brasil. Además, y tomando como base la experiencia de lxs trabajadorxs, demuestra cómo el cambio climático acentúa las desigualdades a nivel local, nacional y mundial.

Esta investigación también aporta elementos de análisis sobre la manera en que los desafíos urbanos en torno al cambio climático pueden orientar los procesos de gobernanza climática a nivel mundial. En el centro de la problemática surge una pregunta fundamental: ¿cómo podemos pasar de respuestas climáticas demasiado tecnocráticas a enfoques centrados en las personas que aborden tanto las necesidades ambientales como las relacionadas con los medios de subsistencia?

Nueva investigación mapea el impacto climático en tres sectores ocupacionales de nueve ciudades

El estudio sobre el cambio climático y la economía informal urbana toma como base el trabajo realizado en Brasil, donde se documentó el impacto del cambio climático para lxs recicladorxs, y lo aplica a lxs vendedorxs ambulantes y lxs trabajadorxs en domicilio, que constituyen dos sectores olvidados en las discusiones y políticas climáticas y laborales. La investigación, llevada a cabo en Bangkok, Belén, Belo Horizonte, Brasilia, Delhi, Florianópolis, Lima, Manaos y Salvador, analiza cómo el lugar de trabajo y el acceso a la infraestructura en ese espacio (como agua, electricidad, baños y refugio) determinan la experiencia de lxs trabajadorxs en torno al cambio climático y a las estrategias para hacerle frente.

Este trabajo es relevante para las discusiones sobre financiamiento climático y puede orientar las estrategias para financiar la adaptación del lugar de trabajo. También pone de relieve el papel que desempeñan los gobiernos locales en las respuestas frente a las crisis para proteger las vidas y las economías bajo su cuidado. Como señala Skinner, “las autoridades locales moldean el ambiente para lxs trabajadorxs. En el mejor de los casos, esto presenta una oportunidad para promover alternativas ascendentes impulsadas por organizaciones de trabajadorxs en diálogo con actores urbanos clave”.

Los primeros resultados indican que el impacto de las condiciones climáticas extremas recae sobre la productividad, la salud física y mental, y los gastos de adaptación. “Estamos observando que lxs trabajadorxs asumen los costos que genera la adaptación a las presiones climáticas. Están invirtiendo en dispositivos de ventilación o enfriamiento, así como pagando un mayor consumo de agua o electricidad. Están teniendo que reducir o cambiar su horario de trabajo, por lo que su productividad disminuye y pierden clientes”, afirma Marcela Valdivia, investigadora y coordinadora del proyecto.

Estas consecuencias llegan más allá de los lugares tradicionales de trabajo y pueden ser diferentes para las mujeres: “Es necesario que se reconozca la realidad de los hogares que funcionan también como lugar de trabajo para lxs trabajadorxs urbanos y que se traduzca en medidas frente al cambio climático”, comparte Shalini Sinha, especialista en el sector del trabajo en domicilio. “La investigación está poniendo en el centro de los discursos sobre el cambio climático a sectores invisibilizados formados en su mayoría por mujeres”. Además, el estudio revela cómo tanto el género como la edad condicionan la experiencia frente a temperaturas extremas en el trabajo y la salud.

Aprovechar investigaciones relativas al clima para el cambio sistémico

Esta investigación se alinea con los principios de coproducción del conocimiento de WIEGO que usamos en la investigación orientada al cambio social. En todas las ciudades implicadas, este proceso fomenta la conciencia climática junto a las organizaciones de trabajadorxs y los aliados estratégicos, lo que ayuda a traducir el léxico técnico respecto al cambio climático en términos más accesibles para quienes padecen las consecuencias directamente.

Este enfoque garantiza que la información recogida no sea únicamente evidencia anecdótica. Como señala Valdivia, “WIEGO y las organizaciones de trabajadorxs aúnan esfuerzos para que los resultados se usen en campañas, trabajo de incidencia, redes sociales y otros espacios a nivel mundial”. Hacer oír la voz de lxs trabajadorxs permite orientar el cambio, principalmente al nivel de las ciudades.

Las ciudades son espacios con potencial para la transformación porque son las que generan y también resuelven los desafíos climáticos. Se presentan a continuación algunas intervenciones estratégicas clave para aprovechar y movilizar la acción climática sistémica.

La primera es transformar el concepto de resiliencia que tienen las autoridades locales. “La transformación depende de que los gobiernos de las ciudades entiendan que construir resiliencia entre lxs trabajadorxs es construir resiliencia para la ciudad. Son indisociables”, comenta Sonia Dias, especialista del sector de recicladorxs de WIEGO.

La segunda se centra en enfoques integrados de diseño y políticas urbanas. Los cambios sistemáticos transversales a varios sectores pueden generar un impacto a largo plazo. “El diseño de las ciudades tiene que incorporar lugares con sombra, espacios verdes abiertos, cuerpos de agua y materiales de construcción resistentes a altas temperaturas. Hacen falta cambios en lo que respecta a la vivienda, el transporte y los medios de subsistencia. Las regulaciones laborales, la resiliencia climática y las transiciones justas deben ser integradas en la planificación y las políticas, de manera rápida y eficiente”, expresa Sinha.

La tercera tiene que ver con forjar alianzas. Dias explica: “Tenemos que prestar atención constantemente al escenario político buscando oportunidades para ejercer nuestra influencia. Necesitamos forjar alianzas, y esto implica establecer lazos con la sociedad civil y aliados en torno a las políticas a nivel local y nacional. Se trata de aprovechar la evidencia para resolver problemas colectivamente”.

Usar la información para el trabajo de incidencia por protecciones climáticas

Estos puntos de intervención estratégica ya están dando resultados. En Brasil, las cooperativas de recicladorxs utilizaron información de monitoreo en tiempo casi real para presionar a lxs fiscales federales frente a la demora en la renovación del acuerdo sobre el uso de los espacios para centros de reciclaje en Florianópolis. En la región metropolitana de Belo Horizonte, pudieron garantizar renovaciones que contemplaran las condiciones climáticas con financiación del sector privado. El impacto que generó la investigación también ha habilitado a lxs recicladorxs la participación en espacios de toma de decisiones, como la Cámara Temática sobre Economía Circular de Brasil que es parte del Foro Nacional del Cambio Climático de Brasil, y en el comité municipal para la adaptación al cambio climático y la eficiencia ecológica de la ciudad de Belo Horizonte.

La inclusión de lxs trabajadorxs en empleo informal en los lineamientos para la autoridad responsable de la gestión de desastres naturales de India también marca un precedente muy importante en términos de especificidad y alcance. Es muy significativo que los lineamientos consideren los riesgos específicos que enfrentan las trabajadoras y que ofrezcan recomendaciones para las trabajadoras del hogar y en domicilio.

Sin embargo, este es solo un primer paso. Para que estos lineamientos se traduzcan en planes de acción efectivos contra temperaturas extremas a nivel de las ciudades que ofrezcan asistencia real a lxs trabajadorxs, se requerirán tanto enfoques convencionales como radicales en torno al empleo, el género, la planificación urbana y la gobernanza. El objetivo en India es involucrar a otros ministerios nacionales para que el impacto sea mayor y nuestra influencia tenga más alcance, pasando de los planes de acción contra temperaturas extremas a planes de acción climática, planes nacionales de adaptación y debates sobre una transición justa.

Puntos clave del proceso de investigación de WIEGO de cara a la COP

Es fundamental fortalecer el poder de lxs trabajadorxs. El proceso de investigación en torno al cambio climático funciona como una herramienta tanto de desarrollo de capacidades como de movilización para que lxs trabajadorxs participen en los espacios de toma de decisiones al respecto a nivel local, nacional y global.

Un cambio sistémico requiere alianzas estratégicas. Para lograr cambios en los discursos y las políticas sobre las condiciones climáticas, hacen falta alianzas en diferentes niveles que sean capaces de sostener y hacer escalar los mensajes políticos. Por ejemplo, las organizaciones de trabajadorxs y los sindicatos consideran lo laboral como parte de luchas más amplias en torno a la vivienda, el espacio público y el acceso a los servicios. Las colaboraciones académicas, principalmente las relacionadas con los informes del IPCC, potencian el conocimiento de base. Y las redes internacionales como C40, CGLU y la Alianza de Ciudades tienden puentes entre las realidades locales y los procesos globales.

El mensaje central de la investigación para el COP30 es claro: las soluciones y el financiamiento frente al cambio climático a nivel mundial deben centrarse en lxs trabajadorxs que tienen un papel fundamental en las ciudades. Reconocer plenamente a lxs trabajadorxs en empleo informal como aliadxs fundamentales en la acción climática permitirá construir puntos estratégicos, alianzas y estrategias de incidencia basadas en evidencia que ya están generando un cambio en las ciudades.

Este es el segundo blog de la serie Analizar la investigación: observaciones de WIEGO desde el terreno.